El joven de 20 años que hace 3 semanas fue asaltado en el centro de Quilmes está transitando la cuarta semana en coma. Pasó por cuatro operaciones y sufrió un paro cardíaco. Su evolución es crítica.
El sábado 29 de abril a la madrugada, Ignacio Grizzo estaba en las inmediaciones de la calle Suipacha al 200 estacionado en su auto con una amiga cuando unos delincuentes se subieron al vehículo para robarle. Los ladrones arrancaron, la chica se arrojó a la calle y a 200 metros, Ignacio se arrojó (o lo arrojaron).
Tras el robo, los jovenes se acercaron en busca de asistencia médica al Hospital de Quilmes, donde "lo trataron como si estuviera borracho o drogado, perdiendo así horas valiosas para el tratamiento del joven" dijo el padre, Antonio Grizzo. A las nueve horas del hecho fue operado por primera vez en el Sanatorio Trinidad de Quilmes
Su salud
A casi un mes del hecho, la salud del Ignacio es crítica. Fue sometido a cuatro complejas operaciones debido al fuerte golpe en la cabeza que sufrió, y debieron extraerle un fragmento de cráneo para descomprimir el cerebro. Además, sufrió un paro cardíaco. Los médicos le retiraron los sedantes a la espera de que Ignacio despierte por sus propios medios, pero aún no responde a los estímulos.
"Su estado sigue siendo crítico y está en observación. Está como un vegetal, no sabemos si va a poder despertar" dijo Antonio Grizzo.
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