Este año, el Municipio tuvo que levantar 11 caballos muertos de la vía pública

 Por Pedro Navarro. En lo que va del año, el Municipio de Quilmes tuvo que asistir y levantar de la vía pública a once caballos muertos que fueron abandonados en la vía pública. En su mayoría son animales que eran utilizados por carreros que trabajan en la recolección de residuos informal para vender y ganarse su sustento, pero lamentablemente no cuidan o no alimentan a los equinos como correspondería. En el mes de Mayo del año pasado, se modificó la ordenanza de tracción a sangre la cual se reglamentó en Diciembre. La misma no permite la utilización de caballos para trabajar; habla de  la incorporación de veterinarios para el control de animales;  de la organización de entidades que trabajan en el reciclado informal, y de la entrega de otro tipo de vehículos. 

Foto archivo


En Quilmes, en el año 2012 se aprobó una ordenanza de prohibición de tracción a sangre. La misma no se aplicó durante las gestiones de los intendentes Francisco Gutiérrez y Martiniano Molina. Ante un reclamo judicial por parte de la entidad Caballos de Quilmes, la Justicia le ordenó al intendente Molina que la reglamente. Eso ocurrió días antes que finalice su gestión

Modificación

En Mayo del año pasado la ordenanza fue modificada. Quedó claro que no se pueden utilizar animales para el trabajo de recolección en la vía pública. Esa ordenanza fue reglamentada en Diciembre del 2020.

Veterinarios y control

La nueva disposición señala que el Municipio contratará veterinarios para el control de caballos en la vía pública y abre un registro de esos animales.

También establece que el Municipio aportará otro tipo de vehículos para que las organizaciones sociales y las personas que se dedican a la recolección de reciclado informal, puedan hacerlo.

Si bien es cierto que hay muchos cartoneros que no utilizan caballos y son ellos quienes empujan carros más pequeños, son muchos quienes continúan utilizando animales que no siempre están bien alimentados y atendidos.

El hecho que el propio Municipio haya tenido que acudir a distintos puntos del distrito a levantar de la vía pública once caballos muertos desde que se inició el año, es un dato a tener en cuenta para que la ordenanza se aplique con urgencia. 



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