Ahora se sabe que el Gobernador bajó los desíbeles y decidió no debe hacer ningún cambio hasta después del 22 de Octubre. Entiende que todos y todas las funcionarios/as son dirigentes de Unión por la Patria y de La Cámpora. No se puede dar el lujo de perder votos. Como se sabe, Insaurralde había sido puesto en la jefatura por Cristina Fernández y su hijo Máximo, cuando en el 2021 el oficialismo fue superado por Unión por la Patria en las elecciones.
Intervención
Todos los observadores políticos coinciden en afirmar que "Cristina prácticamente le intervino el gobierno a Kicillof" y que la jefatura fue un organismo de poder de los aliados de Cristina y su hijo Máximo. Insaurralde tenía también el apoyo de numerosos intendentes del oficialismo.
A tal punto fue el malestar de Kicillof que si bien aceptó la imposición de Cristina en ese momento, formó una jefatura de gabinete paralela, manteniendo al frente de la jefatura de asesores a quien había ocupado la titularidad de la jefatura de gabinete hasta antes de la intervención. Se trata del quilmeño Carlos Bianco.
Calma
En el entorno del Gobernador resaltan que está muy enojado con Insaurralde por lo sucedido pero por otro lado que se siente con mayor poder y de ganar, no aceptará "más imposiciones".
Proyecto
Por lo pronto el proyecto para eliminar la jefatura de Gabinete lo enviaría recién después del 22 de Octubre. Espera un resultado favorable y así consolidar su propio poder.
También estaría dispuesto a analizar el proyecto de Juntos por el Cambio que pretende eliminar una de las cámaras en funcionamiento, Diputados y Senadores, aunque en principio no estaría de acuerdo. Piensa en una reforma más profunda.
Todos y todas adentro
Por lo pronto, la única verdad y realidad es que el único funcionario del gobierno que quedó afuera fue Martín Insaurralde. Toda su estructura quedó intacta. Por ahora no se va nadie.
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